Cualquier cosa que se te ponga por delante y que te impida alcanzar dicho objetivo se considera un obstáculo y deberás superar muros, barandillas, vallas de publicidad, mobiliario urbano, vegetación, bancos, edificios… lo que se interponga en tu camino. Como hemos dicho, esta forma de desplazarse exige entrenamiento para contar con la suficiente fuerza y resistencia física. Se puede entrenar de forma paulatina y segura, moviéndote durante tus caminatas cotidianas realizando movimientos básicos y probando trucos nuevos. Además, practicar el freerunning también es perseguir la belleza en los movimientos, el uso de acrobacias para moverse de manera admirable, tal cual admiramos a los gatos cuando observamos la agilidad con la que se mueven y salvan obstáculos.
Y ahí es cuando este fenómeno podría denominarse un estilo de vida. ¿Podríamos desplazarnos continuamente en modo Parkour? Al fin y al cabo es una forma de hacerlo segura y eficiente. ¿O crees que es algo muy extravagante como para estarlo practicando frecuentemente? ¿Estás de acuerdo con que es una disciplina segura?
Juzga tú mismo si te parece una disciplina lo suficientemente segura y si podría considerarse un estilo de vida y una forma bella de desplazarse de un sitio a otro.